Previous Page  44 / 56 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 44 / 56 Next Page
Page Background

44

Revista de Educación •

Política educativa

La XVI Región de Ñuble (capital: Chillán) es una de

las 16 regiones en que se divide administrativamente

Chile. Con una superficie total de 13.178,5 km² y

administrativamente constituida por 3 provincias y 21

comunas, posee una población de 480.609 habitantes.

¿En qué consiste el trabajo de la Unidad de Reducción de

Riesgo de Desastres en la Región de Ñuble?

Es un gran aporte, ya que de manera paulatina se está

tomando conciencia de la prevención para la reducción de

riesgos en los establecimientos educacionales, lo que ha

tomado fuerza debido a la pandemia de COVID-19. No

obstante, existe mucho por hacer, en cuanto a recursos

tangibles e intangibles que son primordiales al momento de

enfrentar una situación de crisis.

Actualmente en la Región de Ñuble, existe una articulación

constante con diferentes servicios que tienen como

propósito avanzar en la prevención, entre ellos: la ONEMI,

Salud, la Mesa Técnica Regional de Salud Mental, entre

otros. Además, hay una línea abierta con los sostenedores y

prevencionistas de riesgos de los distintos establecimientos

regionales, con la finalidad de avanzar o resolver dudas

o consultas, lo que incide directamente en los alumnos,

docentes, asistentes de la educación y la comunidad

educacional en general.

¿Cómo se integran las acciones entre la seguridad escolar

y la Unidad de Gestión de Riesgo?

Buscando instancias tangibles que ayuden o lleven a una

mejora continua tanto en materia de seguridad escolar

como en lo relativo a la Unidad de Gestión de Riesgo.

Tomamos todas las instancias que están al alcance para

traspasarlas a las comunidades educativas, por ejemplo,

apoyamos la gestión de comunicación de cursos sobre PISE

(Plan Integral de Seguridad Escolar) dictados por la ONEMI,

con la finalidad de aumentar la cantidad de docentes o

asistentes de la educación que participan. De esta manera,

Entre un volcán

activo y el deterioro

de la salud mental

Guillermo Enrique Gómez,

Coordinador de Emergencia URRD

(SEREMI de la Región de Ñuble)

los establecimientos educacionales pueden visualizar

espacios de mejora o actualización de aspectos que pueden

haber pasado por alto, además que es importante que se

revise y evalúe de forma periódica debido a los cambios

antropológicos y geológicos de cada sector o comunidad

escolar de cada comuna, región y país.

¿Alguna actividad que quisiera destacar?

Hemos realizado diversas coordinaciones, algunas internas

como acciones en jornadas del CPEIP y externas, con la

Mesa de Salud Mental, la que ha cobrado especial relevancia

por la pandemia, debido al deterioro de la salud mental de

la población en general, además de las restricciones que

provoca la circulación del virus de COVID-19.

Con la ONEMI estamos en comunicación constante debido

a varias situaciones que afectan a la Región de Ñuble, como

amenazas por incendios forestales en períodos estivales o la

situación del volcán Chillán que afecta a las comunas de San

Fabián y Pinto.

Hicimos simulacros abiertos a la comunidad antes de la

pandemia, visitamos establecimientos con riesgos de

afectación por tsunami, y cada vez que se requiere asistir

a un COE (Comité de Operaciones de Emergencia),

independiente del día y la hora, se asiste a fin de estar

atentos ante cualquier situación que pueda afectar algún

establecimiento educacional.

Además, con la Seremi de Salud desde marzo de 2020

hemos estado en constante comunicación para organizar

muestreos preventivos de COVID mediante PCR, ayudar

a convocatorias al curso Primeros Auxilios Psicológicos y

en 2020, a procesos de revisión de los establecimientos

educaciones para un retorno a clases seguro tanto para los

docentes, alumnos y asistentes de la educación. Incluso,

trabajamos en la coordinación del proceso de vacunación de

COVID-19 para los docentes y asistentes de la educación.