

Se lo adjudicó la profesora Andria Zafirakou del Reino Unido. Estímulo que
reconoció la labor que hace en el Alperton Community School en la ciudad de
Londres.
La maestra de artes textiles convive con la diversidad, porque sus alumnos
provienen de diferentes países. Este entorno diverso se suma a las malas
condiciones de vida que tienen algunas familias de emigrantes en Londres, lo que
conlleva hacinamiento y pocas posibilidades de estudiar, por ende es muy común
que los jóvenes decidan pertenecer a pandillas ligadas a la drogadicción y al robo.
Para cambiar esta situación, Zafirakou promovió actividades deportivas y lidera
cursos de inducción para profesores novatos de su colegio, entre otras cosas.
“Me gusta trabajar con ellos porque son muy apasionados por las clases, eso es
lo que más me encanta”, sostiene la inglesa.
PROTAGONISTAS
EL GLOBAL TEACHER
PRIZE 2018
Revista de Educación Nº 382
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