Previous Page  27 / 56 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 27 / 56 Next Page
Page Background

CÓMO CONSEGUIR UN CAMBIO CULTURAL ENFOCADO

EN LA INCLUSIÓN

Según la experta, hay que comenzar dando

pequeños pasos, con algo que se pueda

hacer todos los días. Por ejemplo, el docente

puede anotar en una pizarra una lista de

criterios o cualidades que deben tener

todas las tareas para ser consideradas “de

buena calidad” o “sobresaliente”. Incluso,

puede añadir una columna con los recursos

de ayuda.

Lo anterior hace que los estudiantes

empiecen a identificar alguna cualidad que

haga de su tarea un trabajo sobresaliente.

Así, se les ayuda a monitorear la calidad de

su propio trabajo y, a la vez, se les impulsa

a ir más allá.

Por otro lado, el profesor puede ver lo que

ellos están haciendo y detectar la ayuda que

necesitan. “Esto se puede hacer diariamente,

pues no se requieren materiales adicionales

ni planificación previa. Son ese tipo de

actividades las que provocan cambios en la

cultura escolar”, agrega.

Sin embargo, pone acento en que no hay

que olvidar que es básico que el docente

conozca muy bien a los estudiantes.

“Creo que la comprensión requerida para

entender a los estudiantes involucra el

conocimiento acerca de sus capacidades,

también una concientización cultural sobre

el contexto en que se desenvuelven y una

concientización propia, acerca de mí mismo

ymis experiencias y sentimientos en relación

a ellos. Todo el conjunto. Después, se puede

modificar o ajustar la instrucción. Ahí nos

encontramos con un desafío: la persona

piensa que su trabajo tiene un término, que

finalizó su aprendizaje, pero no es así. Y eso

es emocionante: existe una combinación

infinita de estudiantes que tienen diferentes

necesidades, fortalezas, y que se presentan

como oportunidades para el profesor”.

Su mensaje a los docentes chilenos es

simple: hay que comenzar de a poco, con

algo pequeño y tratar de replicarlo todos

los días, ya sea pararse en una caja para

dar instrucciones y no salir de allí hasta

que “todos” los estudiantes comiencen a

trabajar o anotar en la pizarra los criterios

para evaluar una actividad y que los alumnos

puedan monitorear su propio trabajo y los

profesores hacer un seguimiento o también,

hacer más visible los recursos de ayuda.

“La inclusión es el arte de entregar

enseñanza, y así hay que abordarlo. No es

una línea continua, por eso es fundamental

que exista apertura para entender a los

estudiantes e involucrar el conocimiento

en relación con las capacidades reales de

cada uno de ellos”, concluye.

Un dato práctico para los docentes: existe

un sitio web llamado “All Learning Every

Day” en el cual podrán encontrar recursos

para hacer sus clases, por ejemplo, una serie

de videos con las rutinas que utiliza Ronda

Bondie. Algunos de ellos están enfocados

específicamente en la infancia temprana,

preescolar y básica. Junto a eso, hay mucho

material especialmente preparado para

enseñanza media.

Más información: Bondie, Rhonda y Zusho,

Akane. “Diferentiated Instruction Made

Practical”. Routledge, Taylor & Francis Group,

Nueva York y Londres, 2018. Disponible para

comprarlo en:

https://www.amazon.com/

Revista de Educación Nº 388

27

TENDENCIAS