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REVISTA DE EDUCACIÓN /
conversando con
viene toda una sucesión de esfuerzos,
cambios de política educacional, que
están culminando con la Reforma de hoy
día que quiere dar respuesta a desafíos
que surgieron hace más de 10 años.
La Reforma Educacional planteada por la
Presidenta Michelle Bachelet quiere salir
al paso frente al fenómeno del proceso
de segmentación y debilitamiento de
la cohesión social que trae consigo
el sistema educacional chileno, tan
dependiente de los ingresos de las
familias, capitales culturales, etc. Hay
un propósito de igualación y de reponer
la lógica republicana de educarse
juntos, pero reformar estructural y tan
profundamente la educación chilena,
no solo en su institucionalidad y modo
de financiarse sino en sus prácticas
educacionales y pedagógicas, incluso en
el aula, en el qué enseñamos, todo eso
siempre es tarea de décadas.
Desde su
investidura como
Premio Nacional,
¿qué mensaje
entregaría a los
docentes?
Hay unanimidad en el sentido de que
tiene que ser un profesional. En mi
opinión, educar profesionalmente
implica manejarse en muchos dominios,
que sólo pueden adquirirse acercándose
al mundo de la investigación. El profesor
debe haberse formado en esta área y, en
lo posible, al menos ser investigador de
su cotidianidad, de sus prácticas.
¿Un personaje
admirable
para usted en
educación?
Yo tengo mis heroínas cercanas. Una de
ellas, a la que he tratado de sacar del
anonimato, es Abdolomira Urrutia, una
maestra normalista de las muchas que
militaban en la Asociación General de
Profesores, que era el gremio reformista
de inspiración libertaria que abrió la
puerta a la reforma de 1928 y todo lo
que viene después.
Participó en un congreso de maestros
en 1927 en Talca y allí defendió los
derechos de la mujer soltera, incluso
para tener sus hijos. Dijo: “Los hombres
se sacan el sombrero cuando pasa una
carroza con un difunto, pero nadie se
saca el sombrero cuando pasa una
mujer embarazada”. Su discurso causó
revuelo en la sociedad de su tiempo.
Hubo anatema del obispo de Talca, quien
se preguntaba: “¿Adónde vamos a llegar
cuando entre los maestros se preconiza
el amor libre?”. La prensa de izquierda