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CIENCIA Y TECNOLOGÍA
Revista de Educación Nº 376
AHÍ ENTRAMOS EN UN
TEMA ÉTICO
Absolutamente. En la convivencia no
deseada que es la guerra se busca ver al
otro como enemigo para destruirlo; y en la
convivencia deseada se busca ver al otro
como amigo para colaborar con él o ella.
Si ampliamos nuestro mirar desde el amar
veremos que el otro u otra no es distinto
de nosotros y por lo tanto, no será nuestro
enemigo. Si restringimos nuestro mirar
desde el prejuicio veremos al otro u otra
como una amenaza y buscaremos negarlo.
USTED HA DICHO QUE
VIVIMOS EN EL “LENGUAJEAR”,
¿PODRÍA EXPLICAR ESTA IDEA?
Que vivamos en el lenguaje no quiere
decir que vivimos en el acto de habla o
de lenguajear, sino que habitamos en los
mundos de haceres que surgen con nuestro
conversar y reflexionar, cosa que solo es
posible con nuestro vivir en el lenguaje.
¿Por qué? Porque vamos generando esos
mundos con los otros en las coordinaciones
de sentires, haceres y emociones que
vivimos en nuestro conversar y reflexionar.
Y como el conversar y el reflexionar ocurren
coordinando nuestras coordinaciones de
sentires, haceres y emociones generamos
todo lo que hacemos en nuestro convivir
humano como seres que escogemos lo
que hacemos.
QUÉ ES EL APRENDIZAJE
¿CÓMO APRENDEMOS LOS
SERES HUMANOS?
En la convivencia, transformándonos juntos
en nuestras coordinaciones de sentires,
haceres y emociones. Lo peculiar de nuestro
convivir humano es que pertenecemos a un
presente que es el continuo resultar de un
devenir histórico en el que lo que se ha
conservado es un modo de vivir y convivir
en coordinaciones de emociones, sentires
y haceres que comienza en la conservación,
en el aprendizaje de los niños y niñas, del
convivir doméstico amoroso de una familia
ancestral de primates bípedos unos tres y
mediomillones de años atrás; modo de vivir
y convivir que es de hecho el lenguajear.
¿DÓNDE SE UBICA AQUÍ LA
EDUCACIÓN?
La educac i ón ocu r re como una
transformación en la convivencia que
va especificando las condiciones de los
encuentros de los niños y niñas a medida
que crecen, configurando un espacio
relacional o contexto en el cual, si todo
funciona de manera adecuada, amorosa,
ellos se transformarán en ciudadanos
serios, responsables y democráticos.
USTED SEÑALÓ EN UNA
OPORTUNIDAD QUE
“EL APRENDER ES UN
FENÓMENO DE CAMBIO
ESTRUCTURAL EN EL
SUCEDER DEL VIVIR DE
UN SER VIVO”, ¿A QUÉ SE
REFERÍA?
En el aprender ocurre como una
transformación estructural coherente con
las circunstancias que se viven. No hay
que olvidar que los seres vivos existimos
en la continua transformación de nuestra
anatomía y fisiología en la medida que
vamos creciendo, haciéndonos mayores
y envejeciendo; y con nuestros cambios
estructurales cambia nuestra conducta, y
con nuestros cambios conductuales cambia
nuestra corporalidad, en un proceso que
sigue un curso guiado por el modo de
vivir y convivir que nos toca o escogemos
vivir. Cuando hablamos de aprender nos
referimos a este proceso.
Distintas circunstancias fisiológicas
y relacionales modulan el curso de la
transformación de un organismo en la
realización de nuestro vivir. Nosotros ahora
somos distintos a como éramos hace un
cuarto de hora, pero no somos distintos de
cualquier manera. En tanto seguimos vivos
nos hemos transformado conservando el
vivir, pero esa transformación, sin embargo,
ha seguido un curso particular guiado
por las circunstancias de nuestro vivir y
convivir. Si había algún temor, éste se ha
desvanecido. Si había alguna curiosidad,
ésta ha disminuido o tal vez ha aumentado.
Todo eso según el curso de los cambios
emocionales que hemos vivido en esta
entrevista.
¿LOS SERES HUMANOS
TENEMOS UNA
ENORME CAPACIDAD
DE TRANSFORMARNOS,
ENTONCES?
Sí, tenemos una estructura cambiante
y es al curso que siguen esos cambios
estructurales en relación con las
circunstancias de nuestro vivir y convivir
a lo que llamamos aprendizaje. En otras
palabras, es a la transformación que
vivimos en coherencia con los cambios de
lo que hacemos en nuestro vivir mientras
se conserva nuestro vivir, a lo que nos
referimos al hablar de aprendizaje. Cuando
reflexionamos también nos está pasando
lo mismo, y cambiamos de una manera
íntima guiados por lo que sentimos en la
reflexión, ya que lo que sentimos en nuestro
reflexionar pasa a ser parte del mundo en
que vivimos y convivimos.