

EDITORIAL
Compartir el conocimiento entre todos
es una práctica no solo muy loable
como intención pedagógica, sino un gran
objetivo en términos educativos, que
traspasa muchas veces las expectativas
de los docentes y va mucho más allá de
las evaluaciones formales que se hacen a
los estudiantes.
Así ha quedado demostrado en el
primer concurso de relatos pedagógicos
“Tu experiencia inspira”, organizado y
llevado a cabo por el CPEIP (Centro de
Perfeccionamiento, Experimentación
e Investigaciones Pedagógicas del
Ministerio de Educación), cuyos ganadores
presentamos en esta edición, certamen
que suscitó el interés de cientos de
docentes de todo el país.
Los participantes fueron llamados a
detenerse un momento para reflexionar
acerca de su ejercicio diario en el aula,
bajo la idea de examinar qué decisiones
han debido poner en acción para mejorar
los procesos de enseñanza y aprendizaje
de sus alumnos y darlas a la luz para
ser compartidas y emuladas por otros
docentes que trabajan en distintos
rincones de Chile.
Esta convocatoria abrió las puertas de
muchas aulas de par en par. Los profesores
y profesoras contaron experiencias muy
variadas, de materias y asignaturas
distintas, algunas de ellas vistas desde
un caso individual que sirvió como
estímulo para multiplicar la estrategia
general y otras tantas que parten de un
desafío común ante cifras adversas en los
resultados del aprendizaje de los alumnos
a nivel de curso o escuela.
La riqueza de los relatos es enorme puesto
que son las voces de sus protagonistas y
tienen el punto de partida y el desarrollo
en sus propios espacios. Los esfuerzos de
COMPARTIENDO
ESTRATEGIAS
PEDAGÓGICAS
los participantes denotan profesionalismo,
pero también mucha motivación personal,
la que han logrado contagiar a los
estudiantes, a todo el cuerpo docente, a
los directivos e incluso a los apoderados,
quienes ya sabemos son esenciales en la
trayectoria escolar de sus hijos.
Una amplia gama de proyectos
pedagógicos se cuenta en esta primera
y exitosa versión del concurso. Aparecen,
por ejemplo, temas como reencantar a
los alumnos con materias duras como la
Matemática, poner al día a alumnos con
problemas de aprendizaje, integrar a los
niños migrantes, captar la atención de
chicos absorbidos por las pantallas de
sus celulares, reforzar la comunicación
a partir de preguntas filosóficas, hacer
tutorías entre los mismos estudiantes,
crear clubes de conocimiento científico,
montar obras de teatro y ferias para
intercambio con otros establecimientos,
incentivar a la lectura desde las nuevas
tecnologías, etc.
La conclusión es que con esta actividad
el Ministerio de Educación, a través
del CPEIP, ha conseguido establecer
un lazo más fuerte de comunicación y
de acercamiento con los docentes en
materia de procesos educativos en el aula,
cuestión fundamental cuando el objetivo
central conjunto es entregar educación
de calidad.
Y quizás lo más destacable también
sea que la motivación y el amor por la
docencia queda retratada en cada una
de las historias de los concursantes, eso
se puede comprobar claramente en los
relatos premiados, los que van en nuestra
sección Zona Pedagógica. A todos ellos les
agradecemos y felicitamos.